"Algunas
puertas deberían permanecer cerradas... En Barrington House, un
elegante bloque de pisos londinense, hay un apartamento vacío. Nadie
entra, nadie sale. Y ha permanecido así durante cincuenta años.
Hasta que una noche el vigilante oye unos ruidos después de
medianoche y decide ir a investigar. Lo que experimenta allí basta
para cambiar su vida para siempre. La joven Apryl llega a Barrington
House procedente de Estados Unidos. Ha heredado un apartamento de su
misteriosa tía abuela Lillian, fallecida en extrañas
circunstancias. Se rumorea que Lillian estaba loca. Pero su diario
insinúa que estuvo implicada en un suceso terrible e inexplicable
varias décadas atrás. Decidida a averiguar algo sobre esta
excéntrica mujer, Apryl comenzará a desentrañar la historia oculta
de Barrington House. No tardará demasiado en descubrir que un mal
que transforma a la gente aún habita el edificio. Y que la puerta
del apartamento 16 es el acceso a algo mucho más terrorífico..."
Voy
a empezar fuerte. Es el peor libro que me he leído en mi vida. Si es
verdad que empieza muy bien, era entretenido y la historia lo tenía
todo para triunfar, pero el autor se va cargando la trama poco a
poco. Os voy a contar un poco su historia.
Barrington
House es
un bloque de apartamentos situado en una de las zonas más elegantes
y caras de la capital británica. Hasta allí llega Apryl,
una joven norteamericana que ha recibido en herencia el apartamento
número 39 tras la muerte de su tía abuela Lillian.
La casa está repleta de tesoros vintage y Apryl apenas puede creer
su buena suerte hasta que los rumores de locura de su tía abuela
empiezan a unirse a visiones un tanto extrañas...
Es
en Barrington House también donde trabaja Seth
como
vigilante nocturno. Llegado a Londres como estudiante de Arte y con
la idea de mejorar su técnica pictórica, esta atrapado en un
trabajo que lo agota física y mentalmente. Pero una noche, durante
su ronda por los silenciosos pasillos de Barrington House, escuchará
algo dentro del apartamento 16. Algo extraño, demasiado extraño,
especialmente porque da la casualidad que el
apartamento 16 lleva cincuenta años cerrado y abandonado...
Lo
que me chocó al empezar a leer es el no saber que el libro inicia
con dos historias paralelas, por un lado, conocemos lo que ocurre a
través de la joven protagonista Apryl, y, por otro lado, conocemos
también el punto de vista de Seth, el vigilante nocturno del bloque
lujoso de apartamento. Sus narraciones van intercalándose mediante
los capítulos. El libro tiene en total 43 capítulo más el epílogo.
Desde
mi punto de vista, lo que al principio comienza con buen ritmo y
anima a su lectura porque la historia es misteriosa, deriva en una
serie de detalles y explicaciones largas y aburridas, por lo que el
miedo, la tensión y la intriga que se supone tiene este libro se
viene abajo y para mi gusto comienza a ser pesado, aburrido y lento,
me ha costado acabarlo la misma vida – mas de dos semanas -,
siempre que leía un capítulo, acababa cansado del libro y lo dejaba
de leer – aparte de que los capítulos son larguísimos -, y al
final acabé decepcionado.
Los
capítulos son bastante largos, y la mitad de ellos podrían
reducirse a menos de la mitad, ya que la mayoría de páginas son
meras descripciones de cosas nefastas y ridículas que no aportan
nada a la trama.
Los
capítulos que narraban las investigaciones de Apryl, sí me
resultaban entretenido debido a que ésta tiene el reto de descubrir
cómo era la vida de su tía abuela demente – y bastante loca –
Lilliam. Pero de lo contrario, los capítulos que narraban la vida de
Seth, eran demasiados fantasiosos y poco real. Eso es lo que me
deprimió del libro.
Creo,
en mi opinión, que el final no es nada sorprendente, porque por la
mitad del libro ya sabes como va a terminar debido a que es bastante
lógico.
Y
la verdad es que no tengo nada más que decir de este libro. No os lo
recomiendo de ninguna manera y espero poder deleitaros con el próximo
libro que estoy deseando traeros.
Puntuación:
2 / 5
Un
saludo...
Qué pena que no te haya gustado, a mí no me llama así que no lo leeré. Un besote :)
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